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Lo que no fue y podría ser

12 de julio de 2016

Ayer se publicaba una sátira en el periódico local Nueva Crónica sobre el paso de Obama por España y su reunión con Mariano Rajoy, lejos de entrar en temas arduos de política y relaciones internacionales en este periódico se imaginan una conversación posible entre ambos dirigentes. Os dejamos aquí la transcripción:

OBAMA RECONOCE QUE LE VA MÁS EL CHORIZO DE GERAS QUE LA CECINA DE ASTORGA

Mariano Rajoy obsequia al presidente de EEUU con un jamón y se enzarzan en una disputa diplomática sobre la supremacía del embutido

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunió ayer con el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que según fuentes que no estuvieron presentes en el encuentro (las mismas que aseguran que Ana Botella ofició de traductora) afirmaron que el líder de los Estados Unidos no quedó muy satisfecho con el regalo de un jamon. Al parecer, Obama reconoció ante Rajoy que hubiera preferido Chorizo de Geras. <<Sí, sí, sí, y cecina de Astorga, no te digo>>, pudo haber respondido el líder del Partido Popular. Una respuesta que le debió afear Obama, que sin querer desmerecer los extraordinarios productos de  la Maragatería reforzó su apuesta por el chorizo de Geras. Según el relato no oficial, Rajoy habría intentado salir al paso reconociendo <<en Moncloa tenemos muchos chorizos, pero de Geras ninguno>>.

Por otra parte, se habrían vivido momentos de tensión en Moncloa cuando Mariano Rajoy se vino arriba y se dirigió en inglés a Obama para preguntarle si en Estados Unidos también <<es el vecino el que elige al alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde>>. Sin embargo, Rajoy no obtuvo respuesta alguna puesto que el traductor del americano presentó su dimisión ante la complejidad sintáctica de la oración que, por otra parte, podría seguir ganando popularidad puesto que una empresa portuguesa de azulejos está interesada en comprarle a Rajoy los derechos de autor para plasmarlo en las cerámicas para adornar bodegas.

 

Y es que, ¡qué sencilla podría llegar a ser la política!, con el Chorizo de Geras Entrepeñas de por medio, quitamos hierro  al asunto y mano a mano degustamos tal manjar.

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